domingo, 27 de febrero de 2011

218-202AC SEGUNDA GUERRA PÚNICA: ROMA VS CARTAGO

Muerto Asdrúbal, asesinado por un esclavo galo, después de la fundación de Cartago Nova, le sucede Anibal, que deseoso de combatir a Roma rompe el tratado de su tío y ataca Sagunto, colonia de origen griego. Roma envía una misión a Cartago con el fin de conseguir del senado cartaginés la destitución de Aníbal. Al no ser aceptada dicha petición comienza la denominada segunda guerra púnica.
Aníbal forma un ejército de unos 90.000 infantes, 12.000 jinetes y 37 elefantes y atraviesa el río Ebro en dirección a los Pirineos, dejando en Hispania a su hermano Asdrúbal al mando de unos 25.000 hombres.
Después de una épica marcha en la que tiene que combatir, a las tribus situadas al norte del río Ebro, a los galos, a las continuas deserciones de sus hombres y a las cuantiosas bajas sufridas en el paso de los Alpes, Aníbal logra llegar a la península Itálica con un reducido ejército de unos 26.000 hombres entre los que se encontraban unos 10.000 hispanos y 8.000 honderos baleares. Atravesando el río Ródano, gracias a la pericia de los hispanos mandados por Annón, hijo de Amilcar al usar odres como flotadores, consiguen la victoria en la batalla de Tesino en el año 218 a.C.
Vencen nuevamente, al mando de Magón, en la batalla de Trebia, en la que el comportamiento de los íberos deteniendo el ataque frontal de los romanos y de los honderos baleares, lanzando sus piedras sobre los atacantes, consiguen inclinar, definitivamente, la batalla en favor de los cartagineses. Prosigue la marcha Aníbal, en el año 217 a.C. atravesando penosamente los pantanos de Etruria, manteniendo siempre en vanguardia a sus tropas íberas y libias y consigue una nueva victoria, en el lago Trasimeno, sobre el cónsul Flaminio.
Llegado este momento, Roma comienza a verse en peligro, por lo que coloca en el consulado a Terencio Varrón quien provoca la batalla de Cannas. En esta batalla, 2 de Agosto de 216 a.C., fueron protagonistas fundamentales las tropas íberas y celtíberas que en un número de unos 9.000, amedrentaron a las tropas de Roma.
La batalla de Cannas se describe de la siguiente forma: Aníbal utilizó su forma clásica de combatir desplegando en forma de media luna y con la intención de ir cediendo en su zona central, compuesta de hispanos y galos, para luego envolver por la retaguardia con la caballería al enemigo. La verdadera batalla se produjo de forma violenta cuando la caballería celta del ala izquierda, en vez de ceder poco a poco, como era costumbre, para luego contraatacar y envolver a los romanos, se enzarzó en una lucha cuerpo a cuerpo, desmontados de sus caballos, hasta conseguir una victoria parcial sobre los romanos. Al mismo tiempo, la infantería hispano-gala aunque luchaba con valor, fue aniquilada por los romanos, rompiéndose la media luna y penetrando peligrosamente en el campo cartaginés. La rápida reacción ordenada por Aníbal al envolver a los romanos con sus alas africanas y de caballería celta, decidieron definitivamente el combate en favor de los cartagineses. Llegado este punto, Aníbal que perdió en la batalla posiblemente un tercio de sus tropas, se volvió prudente y no quiso dirigirse hacia Roma, acción muy criticada por su lugarteniente Maharbal diciéndole " Aníbal, sabes vencer, pero no sabes aprovecharte de la victoria".
Llegado el invierno, descansó con su ejército en Capua, a la espera de tropas de refuerzo que nunca fueron enviadas desde Cartago, por la clara animadversión de un senador, llamado Hannón, en contra de los Barca.
Aníbal solicitó a Asdrúbal, refuerzos de Hispania y éste emprendió el viaje atravesando también los Alpes y adentrándose en Italia, pero fue derrotado y muerto en la batalla de Metauro (207 a.C.), por lo que Aníbal quedó aislado en Italia y se dirigió al país de los Abruzos.
Entretanto, Escipión acabó la conquista total de la península ibérica con las tomas de Cartago Nova (209 a.C.), Gades (206 a.C.) y Menorca (203 a.C.). Propuso al Senado romano la conquista del norte de Africa y unido a Masinisa vence a los cartagineses en las grandes llanuras. Al verse Cartago en serios apuros, llama a su defensa a Aníbal, que se entrevista con Escipión y le propone la cesión de Baleares, Hispania, Sicilia y Cerdeña a lo que Escipión se niega. Se entabla entonces, la última gran batalla del general cartaginés, en la que con clara inferioridad, lucha hasta la extenuación y es derrotado en Lama, lo que supone el fin del imperio cartaginés que debe firmar una paz con unas condiciones
humillantes que a la larga desencadenarían un rebrote de las hostilidades contra Roma.
http://www.pobladores.com/channels/arte_y_literatura/Historia_y_mitos/area/16/subarea/1 

No hay comentarios:

Publicar un comentario