miércoles, 2 de julio de 2014

Domingo Sangriento (1972)

El Domingo Sangriento de 1972 (en inglés: Bloody Sunday) fue una jornada de incidentes ocurridos en Derry (Irlanda del Norte) el domingo 30 de enero de 1972, en el contexto del conflicto de Irlanda del Norte. Aquella tarde estaba convocada una manifestación a favor de los derechos civiles y en contra del internment -encarcelamiento sin juicio a los sospechosos de pertenecer al IRA, aprobado en agosto de 1971 por el gobierno de Irlanda del Norte- por el que se encontraban detenidas centenares de personas.1 A la protesta acudieron más de 15.000 personas.
La manifestación, convocada por la Asociación por los derechos civiles de Irlanda del Norte (NICRA) se inició pacíficamente. Aunque en principio estaba previsto marchar hasta el ayuntamiento de la ciudad, las autoridades británicas habían prohibido expresamente salir a los manifestantes de los barrios católicos, cercados por barricadas (la zona conocida como Derry Libre oFree Derry). Además, existía la genérica prohibición de celebrar manifestaciones públicas, prorrogada por el gobierno norirlandés unos días antes.2 En todo caso, la organización de la manifestación decidió renunciar a abandonar el Bogside, para no desafiar a los soldados que rodeaban la zona.3 Un regimiento de paracaidistas del ejército británico había sido enviado a Derry.
Un pequeño grupo de manifestantes, apartado del núcleo principal, comenzó a lanzar piedras a una de las barricadas. Los soldados respondieron al principio con gas, balas de goma y agua a presión. Instantes después las tropas británicas salieron de las barricadas, abriendo fuego contra la multitud. Trece personas murieron y fueron heridas más de treinta, por disparos del Primer Batallón de Paracaidistas del Reino Unido. Una decimocuarta víctima moriría meses más tarde. Los paracaidistas alegaron estar siendo objeto de disparos, algo que resultó ser falso.

Consecuencias

En los días siguientes se produjeron graves incidentes en todo el mundo en protesta por lo ocurrido: la embajada británica en Dublín fue incendiada,8 en Belfast se produjeron atentados con bomba por parte del IRA. Manifestaciones en Milán,9 atentados en Berlín Occidental.10 Incluso en Nueva York se registraron amenazas a los establecimientos comerciales británicos,11 con disturbios frente al Consulado de Boston.12 Al día siguiente de los hechos, la diputada independiente Bernadette Devlin, presente en la manifestación, abofeteó al Ministro del Interior británico, Reginald Maulding, increpándole: "ayer me disparó su ejército", "hipócrita asesino".13 Unas 15.000 personas asistieron a los funerales por las víctimas.8 En el ámbito internacional, existió el temor de que el incidente significara el estallido de una guerra entre Irlanda y el Reino Unido, justo cuando ambos países ingresarían ese mismo año a la Comunidad Económica Europea, aunque al final ni siquiera se rompieron las relaciones diplomáticas entre ambos países14
El primer ministro británico, Edward Heath, encargó una investigación inmediata tras los incidentes al Presidente del Tribunal Supremo, Lord Widgery.15 Dicha investigación fue presentada en menos de tres meses, y sus conclusiones exoneraban a los soldados que habían participado en la matanza, al entender que actuaban en defensa propia. No se demostró que ninguna de las víctimas, u otros manifestantes, fueran armados pero sí que algunos de ellos habían sido tiroteados y asesinados por la espalda.1
Aunque el recrudecimiento de las actividades del IRA contra el gobierno británico había empezado tres años antes del Domingo Sangriento, la organización todavía era débil y pequeña; de hecho, graffitis en muchas lugares antes del día fatídico afimaban que IRA significaba I Ran Away (Yo huí), aludiendo claramente a la inactividad y supuesta falta de valentía que demostraba en dicha época.16 De cualquier manera, el Domingo Sangriento provocó una oleada de apoyo al IRA, aumentando sensiblemente el número de reclutamientos de la banda. Los disturbios que siguieron a esta jornada llevaron a la suspensión de la Asamblea de Irlanda del Norte y la imposición del gobierno directo desde Londres (Direct Rule).1
Ante las dudas no resueltas durante veinte años, en 1998 el entonces primer ministro británico Tony Blair encargó una "nueva investigación judicial completa".17
El 15 de junio de 2010, el recientemente elegido Primer Ministro, David Cameron, publicó el resultado de la investigacion. Las conclusiones fueron que los fallecidos iban desarmados y que fueron los soldados británicos quienes dispararon, siguiendo órdenes que no deberían haber sido dadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario