La historia criminal del cristianismo está bien documentada en la serie de libros de Karlheinz Deschner con ese título y comienza ya en los libros que conforman la Biblia origen de esta religión. Hay numerosos pasajes que relatan y justifican democidios ordenados o ejecutados por Yahvé, el dios de los Israelitas y posteriormente el dios de los cristianos.
El diluvio universal, poblaciones de Sodoma y Gomorra, democidio de los primogénitos egipcios, muerte a los propios israelitas por murmurar contra Moisés, son solo tres de los muchísimas masacres y asesinatos que la biblia atribuye a Jehová. Enlace.
Toda esta violencia a cargo del dios hebreo inaugura y legitima la que hemos dado en llamar Yihad para los musulmanes y guerra santa para los cristianos que se materializará más tarde en las cruzadas.
Mucha gente cree, ignorantemente, que el antisemitismo lo inventaron los nazis cuando la verdad es que ya lo sembraron los escritores del Nuevo Testamento y más tarde doctores de la iglesia como Juan Crisóstomo, Efrén de Siria, Jerónimo de Estridón e Hilario de Poitiers.
Con la institucionalización del cristianismo como religión del estado, Constantino I hizo que el poder comenzase a instalarse en el núcleo de la “pacífica” religión fundada por Cristo convirtiéndola en perseguidora de herejes y paganos. Vease, “Los cristianismos derrotados” de Antonio Piñero.
De entre los padres de la Iglesia son famosos: Atanasio y Ambrosio por su acérrima virulencia contra los arrianos y Agustín de Hipona y Tomás de Aquino que introducen el concepto de guerra justa en la teología cristiana. Enlace.
En cuanto a la esclavitud, Pablo dice a los antiguos cristianos: "Todos los que habéis sido bautizados en Cristo, os habéis revestido de Cristo. Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer: todos sois uno en Jesucristo" (Gal 3, 27-28; Col. 3, 11). Imposible anunciar un principio más radical de igualdad. Pero al mismo tiempo en sus recomendaciones morales Pablo exhorta a la sumisión de los esclavos a sus amos (Ef.6, 5-6, Col.3, 22; y la 1ª Ep. de Pedro añade "incluso a los que son duros" 2,18). Constantino desaprueba poseer esclavos cristianos y sobre todo venderlos a no cristianos. Pero la esclavitud como tal, tan profundamente arraigada en las sociedades mediterráneas, y cuyo origen se perdía en la noche de los tiempos, se sigue aceptando, sin cuestionar su legitimidad y normalidad. La Iglesia se limitaba ante ella a la proclamación de la igualdad ante Dios, las exhortaciones a la caridad y a la buena conducta, sin afrontar la abolición de instituciones jurídicas que le sobrepasaban. Pocas voces aisladas proclaman su inmoralidad, como la de San Gregorio de Nyssa (334-394) que considera la posesión de esclavos como un grave pecado. Pero la Iglesia, siguiendo a Ignacio de Antioquia, es contraria a las reclamaciones de los esclavos cristianos de ser emancipados a costa de ella. En el Concilio de Gangra (340), la iglesia excomulga a los cristianos que animan a los esclavos a desobedecer a sus amos. Enlace.
Ya en la edad media asistimos al ascenso de los papas hasta conseguir un poder casi absoluto, surgiendo figuras como Gregorio I y sobre todo Inocencio III el papa más poderoso de la historia.
Otros papas como León IV, Juan VIII y Juan X eran guerreros o asesinos como Sergio III.
La iglesia promueve las cruzadas contra los musulmanes pero también contra los albigenses en 1204 y contra pueblos bálticos considerados paganos por la orden Teutónica. Además los papas organizan guerras por su cuenta como la de Martín IV contra el rey de Aragón Pedro III el grande en 1284 y 1285.
A pesar de la doctrina no violenta de Cristo plasmada en las bienaventuranzas la violencia de la iglesia católica es un factor determinante presente a lo largo de la hstoria. Las cruzadas, la aniquilación de los cátaros, las guerras de religión en Europa, la caza de brujas, la corrupción de los papas medievales y la ambigüedad de los modernos al tratar fenómenos como el nazismo, la corrupción de los gobiernos, la avaricia de las grandes empresas y el posicionamiento al lado de dictadores tan cruentos como Franco y Pinochet hacen de la iglesia blanco para todas las acusadoras miradas ya que legitima “por derecho divino” el gobierno de no pocos asesinos ya sean generales o reyes. Todo eso sin contar los casos de pederastia y el descubrimiento de fosas comunes infantiles en instituciones religiosas de Irlanda que acusan de graves delitos contra el amor precisamente a religiosas que debieran haber dado ejemplo de él.
https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_criminal_del_cristianismo
https://es.wikipedia.org/wiki/Padres_de_la_Iglesia
https://es.wikipedia.org/wiki/Donaci%C3%B3n_de_Constantino
http://www.heraldo.es/noticias/internacional/2017/03/03/hallan-gran-numero-ninos-enterrados-una-fosa-convento-irlandes-1162460-306.htmlEl diluvio universal, poblaciones de Sodoma y Gomorra, democidio de los primogénitos egipcios, muerte a los propios israelitas por murmurar contra Moisés, son solo tres de los muchísimas masacres y asesinatos que la biblia atribuye a Jehová. Enlace.
Toda esta violencia a cargo del dios hebreo inaugura y legitima la que hemos dado en llamar Yihad para los musulmanes y guerra santa para los cristianos que se materializará más tarde en las cruzadas.
Mucha gente cree, ignorantemente, que el antisemitismo lo inventaron los nazis cuando la verdad es que ya lo sembraron los escritores del Nuevo Testamento y más tarde doctores de la iglesia como Juan Crisóstomo, Efrén de Siria, Jerónimo de Estridón e Hilario de Poitiers.
Con la institucionalización del cristianismo como religión del estado, Constantino I hizo que el poder comenzase a instalarse en el núcleo de la “pacífica” religión fundada por Cristo convirtiéndola en perseguidora de herejes y paganos. Vease, “Los cristianismos derrotados” de Antonio Piñero.
De entre los padres de la Iglesia son famosos: Atanasio y Ambrosio por su acérrima virulencia contra los arrianos y Agustín de Hipona y Tomás de Aquino que introducen el concepto de guerra justa en la teología cristiana. Enlace.
En cuanto a la esclavitud, Pablo dice a los antiguos cristianos: "Todos los que habéis sido bautizados en Cristo, os habéis revestido de Cristo. Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer: todos sois uno en Jesucristo" (Gal 3, 27-28; Col. 3, 11). Imposible anunciar un principio más radical de igualdad. Pero al mismo tiempo en sus recomendaciones morales Pablo exhorta a la sumisión de los esclavos a sus amos (Ef.6, 5-6, Col.3, 22; y la 1ª Ep. de Pedro añade "incluso a los que son duros" 2,18). Constantino desaprueba poseer esclavos cristianos y sobre todo venderlos a no cristianos. Pero la esclavitud como tal, tan profundamente arraigada en las sociedades mediterráneas, y cuyo origen se perdía en la noche de los tiempos, se sigue aceptando, sin cuestionar su legitimidad y normalidad. La Iglesia se limitaba ante ella a la proclamación de la igualdad ante Dios, las exhortaciones a la caridad y a la buena conducta, sin afrontar la abolición de instituciones jurídicas que le sobrepasaban. Pocas voces aisladas proclaman su inmoralidad, como la de San Gregorio de Nyssa (334-394) que considera la posesión de esclavos como un grave pecado. Pero la Iglesia, siguiendo a Ignacio de Antioquia, es contraria a las reclamaciones de los esclavos cristianos de ser emancipados a costa de ella. En el Concilio de Gangra (340), la iglesia excomulga a los cristianos que animan a los esclavos a desobedecer a sus amos. Enlace.
Ya en la edad media asistimos al ascenso de los papas hasta conseguir un poder casi absoluto, surgiendo figuras como Gregorio I y sobre todo Inocencio III el papa más poderoso de la historia.
Otros papas como León IV, Juan VIII y Juan X eran guerreros o asesinos como Sergio III.
La iglesia promueve las cruzadas contra los musulmanes pero también contra los albigenses en 1204 y contra pueblos bálticos considerados paganos por la orden Teutónica. Además los papas organizan guerras por su cuenta como la de Martín IV contra el rey de Aragón Pedro III el grande en 1284 y 1285.
A pesar de la doctrina no violenta de Cristo plasmada en las bienaventuranzas la violencia de la iglesia católica es un factor determinante presente a lo largo de la hstoria. Las cruzadas, la aniquilación de los cátaros, las guerras de religión en Europa, la caza de brujas, la corrupción de los papas medievales y la ambigüedad de los modernos al tratar fenómenos como el nazismo, la corrupción de los gobiernos, la avaricia de las grandes empresas y el posicionamiento al lado de dictadores tan cruentos como Franco y Pinochet hacen de la iglesia blanco para todas las acusadoras miradas ya que legitima “por derecho divino” el gobierno de no pocos asesinos ya sean generales o reyes. Todo eso sin contar los casos de pederastia y el descubrimiento de fosas comunes infantiles en instituciones religiosas de Irlanda que acusan de graves delitos contra el amor precisamente a religiosas que debieran haber dado ejemplo de él.
https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_criminal_del_cristianismo
https://es.wikipedia.org/wiki/Padres_de_la_Iglesia
https://es.wikipedia.org/wiki/Donaci%C3%B3n_de_Constantino
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